Los dientes pueden dañarse demasiado debido a las caries, las infecciones o los traumatismos como para poder salvarlos. Cuando esto le sucede a uno o más dientes, su dentista a menudo recomendará extraer los dientes afectados. La extracción de dientes también se recomienda con frecuencia para niños con dientes muy apiñados que causan molestias o tienen muelas del juicio impactadas. La extracción de un diente o dientes puede ayudar a evitar o simplificar el tratamiento de ortodoncia.
La decisión de extraer un diente a veces se basa en el costo porque a menudo es menos costoso que restaurar un diente natural. Esta puede ser una decisión miope en términos del costo a largo plazo de los tratamientos adicionales. No reemplazar un diente faltante también puede afectar su salud a largo plazo. Es importante entender estas consecuencias.
No todos los dentistas realizan la extracción de dientes. Su dentista puede referirlo a un cirujano oral para algunos o todos los procedimientos que necesita.
Hay dos tipos de extracción de dientes: "simple" y "quirúrgico".
En la extracción de dientes simple, un dentista extrae un diente de una sola pieza sin hacer una incisión en las encías. Generalmente, los dientes extraídos de esta manera tienen raíces rectas y suficiente estructura dental que se extiende a través de las encías.
En la extracción quirúrgica de dientes, un dentista necesita hacer una incisión en el tejido de la encía para extraer el diente, cortar el diente en pedazos para extraerlo más fácilmente, o ambas cosas. También puede ser necesario que el dentista extraiga parte del hueso de la mandíbula para extraer el diente de forma segura.
Su dentista puede recomendar la extracción quirúrgica del diente si un diente está muy dañado y tiene múltiples raíces curvas o retorcidas. Por lo general, también se requiere para un diente impactado.
Algunos de los beneficios de la extracción de un diente o dientes incluyen:
Tanto la extracción dental simple como la quirúrgica tienen algunos pasos en común:
La extracción quirúrgica del diente puede incluir uno o más de los siguientes pasos adicionales:
Su dentista puede recomendarle extraer una muela del juicio si está infectada o le causa dolor. También se puede recomendar la extracción de las muelas del juicio si está claro que el diente no entrará en la boca correctamente, si el diente puede dañar los dientes adyacentes o si la muela del juicio se aglomerará en la boca.
Algunas muelas del juicio se pueden extraer sin cirugía. Sin embargo, si el diente está impactado y se recomienda la extracción, se requerirá cirugía. En algunos casos, no es necesario extraer las muelas del juicio.
La falta de dientes puede afectar seriamente su capacidad para masticar, hablar con claridad y su apariencia. También puede provocar cambios en su estado nutricional y contribuir a la obesidad, la diabetes y las enfermedades cardíacas. Es importante reemplazar cualquier diente que haya sido extraído.
Idealmente, un diente infectado o dañado puede tratarse antes de que sea necesaria la extracción del diente. Si la eliminación es necesaria, no hay verdaderas alternativas. En algunos casos, la(s) raíz(es) de un diente se pueden dejar en la mandíbula pero pueden requerir una terapia de conducto. Si las raíces se dejan en su lugar, el dentista o el cirujano oral están obligados a informarle para que pueda analizar las expectativas de curación.
Última actualización: 3/5/2021 • Revisión médica: Thomas J. Greany DDS, 20/2/2021
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